sábado, 23 de octubre de 2010

Capítulo 307. "Siempre Suave"

Sonando: DULCE CASTIGO (Los Suaves)


Recuerdo mis dos primeros conciertos de Los Suaves como dos espectáculos lamentables, no por el grupo que siempre está sobresaliente sino por Yosi (el cantante). El año pasado, con su concierto en la Sala Apolo, me reconcilié con el grupo en la ya mítica noche del "sextete". También tuvimos la oportunidad de hablar con Charly, bajista del grupo y hermano de Yosi, un señor super campechano (igualico que el rey) que hablaba con nosotros como si nos conociera de toda la vida.

Ayer Los Suaves volvian a Barcelona, Iñaki, Germán y yo fuimos los valientes que asistimos al acontecimiento. Antes del concierto estuvimos haciendo una previa en el "Pepe" y en el "Dulce Castigo", cuando llegamos a la sala el concierto estaba a punto de comenzar, allí me encontré a Javi y Rafa que también asistian. Nos pusimos en cuarta o quinta fila, salieron Los Suaves y, tal como pronostiqué, "Preparados para el Rock'n'Roll", a la segunda o tercera canción, a base de votar, nos pusimos en primera fila. La banda estuvo increible, una vez más, tocaron todos los clásicos (sólo faltó el "Si Pudiera") y unas cuantas del excelente nuevo disco. El concierto se alargó hasta las 2 horas y cuarto, la banda está en buena forma y el Yosi ya no la lia como antes, cosa que todo el grupo agradece (incluidos sus compañeros).

Acabamos hechos polvo pero con ganas de más. El "Pepe" estaba a reventar y nos fuimos al "Dulce Castigo", allí unas cervecitas, unos chupitos y ración doble de patatas cortesia de Mireia, la camarera que se dedicó a perseguirnos por casi todos los garitos por los que pasamos.

Volvimos al "Pepe", en la puerta estaba Tino, bateria del grupo, que en seguida me reconoció como el tio que sale con la pancarta "si la vida tuviera banda sonora seria de Los Suaves", eso sí, en aquel concierto yo era rubio (¡como en la foto de mi dni!). En eso no acertó, pero si que se fijó que se fijo que estaba en primera fila en este concierto.. Estuvimos un rato charlando, nos firmó las entradas y la chuleta con estrofas de las canciones que había conseguido Iñaki del escenario. Seguidamente apareció Charli que, un año después, todavia se acordaba de nosotros, antes de que le dijéramos nada nos dijo "a vosotros os conozco". Una vez más estuvo impresionante. Nos habló de las letras del grupo, de que no han tocado el "Si pudiera" por falta de tiempo, que no tocan "El último pecado" (posiblemente la mejor canción del último disco) porque todavia no les acaba de salir bien en los ensayos (pero prometió que saldrá y que acabará siendo un clásico de los directos) y mil cosas más. He hablado con bastante gente de grupos después de un concierto y, salvo alguna excepción de "endiosamiento", todos suelen ser muy amables, pero no he conocido ha nadie tan cercano y tan entrañable como Charlie, la gente no sólo adora a Los Suaves por su música o por sus directos, la gente adora a Los Suaves porque Los Suaves adoran a su gente.



Los Suaves hicieron que la noche fuera mágica, nosotros continuamos nuestra ruta visitando el Coyote (hasta allí nos siguió Mireia) donde Iñaki ganó un CD en un sorteo (tongo!tongo!), el Hijos de Cain que estaba muy lleno y el Ceferino que estaba todavia más lleno (y con Mireia detrás de la barra again). Lo último que recuerdo es jugarme con Iñaki a piedra, papel, tijera quien se bebia la cerveza más llena y la vuelta en taxi. Me fui a dormir satisfecho, y me he despertado a tope, mi próximo objetivo en la vida es conseguir toda la discografia original de Los Suaves, ¡se lo merecen!.

Puro_Trap. Suavizado.

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